Para muchos arquitectos, el valor de un edificio se define
por el diseño y la fachada. Sin embargo, este aspecto del
edificio no es sólo una expresión arquitectónica, sino que
también tiene que cumplir con importantes requisitos técnicos
para mejorar las condiciones de vida del trabajo.
Estos requisitos se centran en el confort
de luz diurna, la ventilación y el ahorro de energía,
y también estabilidad estructural.
Un muro cortina es un sistema de fachada acristalada y generalmente
ligera, es independiente de la estructura que soporta
el edificio, que se construye por delante de ella.
Un muro cortina está diseñado para resistir el viento, así
como su peso, y enfocarla a los forjados.
Normalmente los muros cortina se construyen mediante
la repetición del modulado que contienen los elementos necesarios
de protección, accesibilidad y apertura según las necesidades del cliente.
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